Es fundamental invertir en el desarrollo de conocimientos a la medida, cualificaciones y aptitudes de la mano de obra. Por ejemplo, hemos capacitado a todo el personal que opera una central térmica (cogeneración de biomasa) para producir electricidad.
La capacitación también permitió compartir conocimientos entre el personal: operadores, ingenieros, gerentes, etc.
Por último, esta formación permitirá en el futuro transmitir información y formar a los nuevos empleados responsables de la explotación de la planta.